Es necesario que se pongan en marcha programas, campañas y estrategias que ayuden a generar cambios reales, desde el entorno empresarial.
Tener una mayor presencia de mujeres líderes lograría que las compañías tengan hasta un 15% más de rentabilidad.
Para avanzar en materia de sostenibilidad y equidad de género en México y Latinoamérica, es indispensable que la sociedad, el gobierno, las compañías y emprendedoras generen estrategias que contribuyan a erradicar el retroceso social y fomenten el desarrollo, en donde el liderazgo femenino es clave.
No por nada, la CEPAL indica que los países de la región atraviesan una crisis importante de crecimiento y desarrollo, por lo que necesitan cambios de estructura que promuevan la igualdad, reduzcan la brecha de género y luchen por el cambio climático antes de entrar en otra “década perdida” y de retroceso en los indicadores sociales de la ONU.
Para seguir ejemplificando esta insuficiencia, una investigación realizada por el IMCO y el Centro de Investigación de la Mujer en la Alta Dirección refiere que las mujeres en posiciones directivas siguen ocupando solo un 12%, aun cuando forman más del 40% de la fuerza laboral en el país.
Aún con estrategias creadas para la sostenibilidad, México se enfrenta a diversos retos para lograr el equilibrio necesario entre su sociedad.
En esta línea, emprendedoras como la mexicana Adriana Pulido, especialista en criterios medioambientales, sociales y de gobierno corporativo (ESG), ha puesto en marcha programas, campañas y estrategias que ayudan al entorno empresarial a generar cambios reales ante las necesidades sociales.
Pulido promueve e impulsa el liderazgo sostenible e igualitario que LATAM necesita para lograr sus objetivos económicos, sociales y culturales, pues como mencionan la CEPAL y el Peterson Institute for International Economics, tener una mayor presencia de mujeres líderes puede lograr que las compañías tengan hasta un 15% más de rentabilidad.
“El liderazgo consciente va más allá de las cifras de rentabilidad y ganancias que las empresas generan a través de sus prácticas de desarrollo; se basa en el impacto positivo que deriva de una mayor representación, inclusividad e igualdad de oportunidades para todos los talentos”, indicó.
De acuerdo con la especialista, para lograr un cambio real en toda la sociedad mexicana es necesario adaptar y estructurar un sistema nuevo, mediante un liderazgo integral que abarque y redefina todos los procesos considerando el entorno social, ambiental y económico.
Añadió que es imposible lograr un cambio profundo y positivo si “no acercamos la sostenibilidad a las empresas, a las personas y a la cultura de consumo: el mundo actual requiere de líderes que entiendan la importancia de atender las necesidades de su entorno… Nos encontramos en tiempos delicados donde la transformación es inevitable y el liderazgo es obligatorio.
Por: Estefanía Santiago – Real State Market